Suscribete

lunes, 16 de enero de 2023

El uso de laxantes debe ser prudente y bajo supervisión médica

Los efectos adversos relacionados con el mal uso o abuso de los laxantes estimulantes son diversos, entre los que destaca la hipovolemia y la hipopotasemia crónicas que, en ocasiones, se acompañan de acidosis y alcalosis metabólica, pero no de un trastorno ácido-básico generalizado.

Hay que recordar que los laxantes estimulantes ejercen sus efectos fundamentalmente a través de la alteración del transporte electrolítico por la mucosa intestinal, al tiempo que aumentan la actividad motora intestinal. Cuando se toman de forma continua pueden asociarse además con enteropatía pierdeproteínas y disminución de la sal.

Las complicaciones clínicas que pueden aparecer son los trastornos electrolíticos relacionados con la diarrea crónica. Como se ha comentado, el más importante es la hipopotasemia, que incluye debilidad muscular generalizada, parálisis muscular o rabdomiólisis, con el consiguiente daño renal, arritmias cardiacas y aumento del riesgo de muerte súbita.

A esto hay que añadir los problemas causados por la deshidratación, como hipotensión, taquicardia y síncope.

Trastornos metabólicos e intestinales

En cuanto a los trastornos metabólicos, el más frecuente es la alcalosis metabólica. El riesgo de que aparezca aumenta si hay vómitos concomitantes.

Por su parte, los trastornos intestinales más frecuentes que pueden acontecer son la inflamación y ulceración de la mucosa intestinal, dilatación del esfínter ileocecal, neuropatía colónica, esteatorrea, gastroenteropatía con pérdida de proteínas, hemorragia digestiva y deshidratación.

En algún caso se ha descrito urolitiasis y necrosis tubular renal. En los casos más graves pueden llegar a desencadenar en enfermedad renal crónica e insuficiencia renal.

Abuso de laxantes estimulantes

El uso de laxantes aumenta con la edad, por lo que el abuso de laxantes estimulantes es un problema frecuente. Algunos estudios han demostrado que el 3 por ciento de los varones y el 5 por ciento de las mujeres usan laxantes al menos una vez por semana. Dicha cifra aumenta considerablemente en ancianos, situándose entre el 39 y 50 por ciento, respectivamente. La incidencia del estreñimiento secundario a abuso de laxantes estimulantes resulta difícil de cuantificar, pero se piensa que es considerable y puede constituir un verdadero problema de salud.

Algunos adultos utilizan laxantes incluso en ausencia de estreñimiento, lo que indica que están acostumbrados a prevenir el estreñimiento. El uso a largo plazo de laxantes estimulantes puede llevar a un estreñimiento crónico debido a la pérdida de la motilidad del colon. En estas situaciones, la educación higiénico-dietética desempeña un papel fundamental.

Ingesta de líquidos

En este sentido, hay que prestar especial atención a la alimentación y a la ingesta de líquidos, al papel del ejercicio, los hábitos de aseo adecuados y los efectos secundarios de los fármacos utilizados para el estreñimiento.

Por eso, es clave que se siga una alimentación rica en fibra, ingerir una cantidad de líquidos suficiente cada día, entre 6 y 8 bebidas al día. El aumento del consumo de fibra dietética debe ir acompañado de una mayor ingesta de líquidos para prevenir la impactación fecal.

También es importante que aproveche el reflejo gastrocólico; ir al baño después de las comidas e ir a la misma hora cada día.

Educación sanitaria

En este contexto, el papel de Enfermería resulta fundamental en la educación sanitaria y seguimiento de estos pacientes, reforzando con el médico de familia las medidas de educación higiénico-dietéticas. También revisa dichas medidas de forma periódica en los distintos contactos del paciente con el profesional sanitario.

Hay que tener en cuenta que los laxantes evacuadores deberían utilizarse en personas que sigan una alimentación con bajo contenido en fibras y sin una causa específica subyacente de estreñimiento.

Hábito intestinal

Los agentes osmóticos pueden ser eficaces en el tratamiento del estreñimiento crónico. El objetivo debería centrarse en la adquisición de un hábito intestinal regular más que en “limpiezas” intermitentes.

Por lo tanto, el tratamiento debería estar encaminado en promover hábitos intestinales regulares, utilizando pequeñas dosis de laxantes, de forma individualizada. Si los agentes osmóticos no son eficaces o no se toleran, los laxantes estimulantes pueden ser eficaces.

En cualquier caso, es importante informar adecuadamente y transmitir el mensaje que el uso de laxantes debe ser prudente y, preferiblemente, con supervisión médica para evitar las complicaciones relacionadas con un mal uso o abuso de estos.

The post El uso de laxantes debe ser prudente y bajo supervisión médica appeared first on El médico interactivo.



from El médico interactivo https://ift.tt/3q8iype

0 comentarios:

Publicar un comentario