Las técnicas de diagnóstico molecular rápido ofrecen rapidez, fiabilidad y ahorro de recursos

Las pruebas de diagnóstico ‘Point of Care Testing’ (POCT, por sus siglas en inglés), se caracterizan porque pueden utilizarse en el punto de atención al paciente, ya sea en la consulta de Atención Primaria, en el centro laboral o, incluso, en su propio domicilio. La ventaja de este tipo de dispositivos es que proporcionan información inmediata al médico o al personal sanitario, por lo que, en consecuencia, se puede acelerar el proceso de diagnóstico y comenzar antes el tratamiento.

La pandemia por la COVID-19 ha puesto de actualidad el uso de este tipo de pruebas diagnósticas en Atención Primaria, principalmente, mediante la detección de antígenos de SARS-CoV-2. Pero dentro de las pruebas POCT también existen nuevas tecnologías de diagnóstico molecular rápido al lado del paciente con resultados equivalentes a la RT-PCR convencional que ofrecen al sistema sanitario inmediatez al conseguir los resultados, fiabilidad y un ahorro de recursos sanitarios.

Los dispositivos de diagnóstico molecular rápido permiten detectar en 13 minutos o menos la presencia de virus en muestras de las vías respiratorias de los pacientes. Estos dispositivos posibilitan realizar pruebas para VRS, gripe, SARS-CoV-2 o estreptococo A, y conocer sus resultados en tiempo real. Esta inmediatez favorece al paciente, puesto que es posible comenzar de inmediato el tratamiento, y, además, reduce la carga asistencial al evitar la derivación a otros servicios hospitalarios.

Atención Primaria

El médico de Atención Primaria también ha tenido que actualizarse para conocer y utilizar estas pruebas diagnósticas. Las nuevas tecnologías permiten ‘acercar’ las pruebas del laboratorio a los centros de salud y a otros tipos de centros asistenciales.

En la actualidad, las pruebas se emplean especialmente en el diagnóstico de enfermedades infecciosas y respiratorias. Igualmente, se emplean no solo en entornos sanitarios, sino también en otras muchas circunstancias.

Respecto a las pruebas respiratorias moleculares rápidas, facilitan el diagnóstico en presencia del paciente, tanto en la consulta como en cualquier otro punto de atención.

Las plataformas disponibles en el mercado están diseñadas para su uso fuera del laboratorio y a través de unos sencillos pasos, el médico recibe orientación paso a paso, por lo que apenas requiere una mínima formación previa.

Beneficios de las técnicas de diagnóstico molecular rápido

Los profesionales en Medicina han enumerado una serie de beneficios de las técnicas de diagnóstico molecular rápido:

• Permiten crear un modelo descentralizado de análisis de pruebas.
• Ofrecen pruebas diagnósticas fiables, de alta precisión clínica.
• Mejoran la capacidad de tomar decisiones inmediatas.
• Ayudan a prescribir tratamientos más adecuados.
• Ahorran costes al sistema sanitario, ya que se producen menos visitas o derivaciones al hospital.
• Eliminan pruebas innecesarias.

Inmediatez para evitar contagios

Gracias a la accesibilidad de este tipo de pruebas, es posible realizar un mayor control de las infecciones. Ante la más mínima sospecha de un posible brote interno, por ejemplo, en un centro sociosanitario, se puede hacer una prueba que confirme o descarte una infección. En caso de confirmación, es posible aislar de forma instantánea al paciente, con lo que se evitan contagios, especialmente, entre la población vulnerable.

Otra característica de estas pruebas diagnósticas es su disponibilidad, ya que se pueden utilizar en cualquier momento. No necesitan la refrigeración de los reactivos y, además, incluyen todos los elementos necesarios para realizar el test.

Estas novedades diagnósticas también ayudan a reducir la carga asistencial de los hospitales, con el ahorro económico que supone. Los resultados de los test rápidos se pueden conocer sin necesidad de consultar con el laboratorio del hospital.

Esta descentralización, igualmente, aumenta la capacidad diagnóstica y resolutiva de Atención Primaria, ya que dota de recursos tecnológicos al médico de Familia, especialmente, al que trabaja en zonas rurales.

Menos antibióticos

Entre los beneficios de las pruebas diagnósticas moleculares rápidas, los expertos hablan de la certeza diagnóstica que permite al facultativo elegir el mejor tratamiento disponible. Así, se ha observado una reducción del uso de antibióticos, ya que el médico puede conocer en la misma consulta si la posible infección que presenta un paciente tiene un origen vírico o bacteriano.

Demostrado su coste-efectividad

Además, estos dispositivos diagnósticos ahorran costes directos, dado que reducen el número de consultas posteriores para hacer el seguimiento. Y, por supuesto, también se evitan los costes de las pruebas en laboratorios hospitalarios o en servicios de Urgencias.

En definitiva, las pruebas de diagnóstico molecular rápido facilitan un diagnóstico precoz y permiten elegir al momento el tratamiento más adecuado. Así, el profesional en Medicina puede ofrecer a su paciente una atención más personalizada.

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