Atención de quemaduras aumenta en épocas invernales

De acuerdo con el sistema de Hospitales Shriners para Niños, los menores de 15 años representan una de cada cuatro quemaduras provocadas por fuegos artificiales.

Por ejemplo, una bengala puede arder hasta en 2.000 grados Fahrenheit. Este calor puede fundir el vidrio y, por lo tanto, puede provocar quemaduras de tercer grado.

Las lesiones por quemaduras pueden producir ceguera

Las lesiones más frecuentes causadas por quemaduras se localizan en las manos, la cabeza y cuello, tejidos en los que provoca cicatrices importantes, en ocasiones, con pérdida de movilidad. En el caso de los ojos puede producir ceguera.

Las acciones de prevención de quemaduras en los niños es una iniciativa primordial para los Hospitales Shriners para Niños que buscan evitar que los niños pasen por un accidente relacionado con el fuego.

Las cicatrices pueden limitar la socialización

Tratar la cicatrización después de las quemaduras representan un problema clínico significativo debido al número de pacientes que desarrollan cicatrices que limitan la interacción social y afectan negativamente la autoestima y las actividades diarias.

El doctor Enrique Garavito, cirujano reconstructivo del Hospital Shriners México, comenta que el tratamiento de este tipo de lesiones son un desafío por su naturaleza proliferativa.

Campaña de prevención de quemaduras en niños

Los consejos de prevención para prevenir quemaduras relacionadas con los fuegos artificiales consisten en:

• No permitir que los niños enciendan fuegos artificiales. Siempre debe haber un adulto supervisando esta actividad.
• No permitir que los niños manipulen las bengalas.
• No intentar encender fuegos artificiales que no funcionaron.
• Los adultos deben desechar todos los fuegos artificiales en un balde de agua.
• Esta actividad debe tener cerca un extintor de incendios y/o una manguera en caso de incendio.
• Enseñar a los niños sobre lo peligroso de los fuegos artificiales.
• Mantener líquidos inflamables (gasolina) lejos del área designada para fuegos artificiales.
• Nunca usar ropa holgada mientras se encienden fuegos artificiales.

 

La mejor- y más segura- forma de disfrutar de los fuegos artificiales es asistir a una exhibición pública dirigida por profesionales capacitados.

Los niños siempre corren riesgo alrededor de los fuegos artificiales, incluso si no son ellos quienes los manipulan. La mejor forma de proteger a los niños es no utilizar fuegos artificiales en casa.

Los especialistas sugieren a los padres buscar atención médica inmediata si un niño resulta herido por fuegos artificiales. No deben utilizar remedios caseros, ya que pueden empeorar la lesión.

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